Por: Prensa Latina
La Habana, 17 feb (PL) El líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, afirmó que el Gobierno de Estados Unidos está manchado realmente de sangre por los crímenes cometidos contra los pueblos.
Al intervenir en un encuentro con intelectuales participantes en la XX Feria Internacional del Libro de La Habana, transmitido por televisión, Fidel Castro se preguntó si el presidente norteamericano, Barack Obama, tenía previo conocimiento del crimen que perpetraría Israel contra científicos iraníes.
La sangre derramada no es simbólica -enfatizó el líder revolucionario- es real y ellos ya no lo disimulan, no lo niegan.
Agregó que los servicios de inteligencia y especialmente la Agencia Central de Inteligencia (CIA) tenían conocimiento de los ataques realizados por los aviones no tripulados que incursionan en los territorios de Paquistán y Afganistán.
Calificó de crimen fascista el atentado contra la congresista de Estados Unidos Gabrielle Giffords, quien ahora se recupera en un hospital de manera paulatina, como si fuera una niña de meses.
En su intervención, criticó las leyes que, en Estados Unidos, permiten la tenencia de armas de fuego y la incapacidad del Gobierno de controlar ese fenómeno.
Fidel Castro destacó la labor de muchos intelectuales, algunos de ellos premios Nobel que realizan esfuerzos por la pronta liberación de cinco antiterroristas cubanos presos en cárceles estadounidenses desde 1998.
Fernando González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Gerardo Hernández y René González cumplen severas condenas por informar sobre planes de acciones violentas contra Cuba fraguados por grupos terroristas, basados en territorio norteamericano.
Fidel Castro recalcó que la especie humana está en peligro real de extinción y es necesario emprender acciones para evitarlo.
También subrayó la importancia de establecer una política mundial de población, la cual debe ser racional y en correspondencia con los tiempos actuales en interés de las personas, pero no de los adinerados.
El escritor venezolano Luis Britto al reflexionar sobre la ideas de Fidel Castro consideró replantear de manera urgente las políticas de desarrollo y señaló que nuestro mundo debe ser objeto de una intensa solidaridad para enfrentar el peligro de las guerras imperiales dirigidas a arrebatar a los pueblos sus recursos fósiles.
No es una cuestión nacional, ni regional, es de interés mundial, de ahí que debamos hacer un modelo alternativo que sirva de ejemplo al planeta, porque existen fuerzas demoledoras que nos están llevando a nuestro fin, dijo el literato.
La humanidad tiene los recursos tecnológicos y científicos para conjurar el mal, pero no cuenta con las estructuras sociales y políticas para combatir los nuevos problemas que se avecinan, puntualizó.
La sangre derramada no es simbólica -enfatizó el líder revolucionario- es real y ellos ya no lo disimulan, no lo niegan.
Agregó que los servicios de inteligencia y especialmente la Agencia Central de Inteligencia (CIA) tenían conocimiento de los ataques realizados por los aviones no tripulados que incursionan en los territorios de Paquistán y Afganistán.
Calificó de crimen fascista el atentado contra la congresista de Estados Unidos Gabrielle Giffords, quien ahora se recupera en un hospital de manera paulatina, como si fuera una niña de meses.
En su intervención, criticó las leyes que, en Estados Unidos, permiten la tenencia de armas de fuego y la incapacidad del Gobierno de controlar ese fenómeno.
Fidel Castro destacó la labor de muchos intelectuales, algunos de ellos premios Nobel que realizan esfuerzos por la pronta liberación de cinco antiterroristas cubanos presos en cárceles estadounidenses desde 1998.
Fernando González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Gerardo Hernández y René González cumplen severas condenas por informar sobre planes de acciones violentas contra Cuba fraguados por grupos terroristas, basados en territorio norteamericano.
Fidel Castro recalcó que la especie humana está en peligro real de extinción y es necesario emprender acciones para evitarlo.
También subrayó la importancia de establecer una política mundial de población, la cual debe ser racional y en correspondencia con los tiempos actuales en interés de las personas, pero no de los adinerados.
El escritor venezolano Luis Britto al reflexionar sobre la ideas de Fidel Castro consideró replantear de manera urgente las políticas de desarrollo y señaló que nuestro mundo debe ser objeto de una intensa solidaridad para enfrentar el peligro de las guerras imperiales dirigidas a arrebatar a los pueblos sus recursos fósiles.
No es una cuestión nacional, ni regional, es de interés mundial, de ahí que debamos hacer un modelo alternativo que sirva de ejemplo al planeta, porque existen fuerzas demoledoras que nos están llevando a nuestro fin, dijo el literato.
La humanidad tiene los recursos tecnológicos y científicos para conjurar el mal, pero no cuenta con las estructuras sociales y políticas para combatir los nuevos problemas que se avecinan, puntualizó.
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